TP2008: Llegó el final

Ya terminé la Tercera Probación, ha sido todo demasiado rápido desde que volví de Arica. En dos semanas hemos despachado un curso sobre la Congregación General 35 con la alegría de ver recuperado a Álvaro Restrepo, el que originariamente iba a ser nuestro instructor, luego evaluamos, hicimos tres días de retiro con renovación de votos incluida, y finalizamos el lunes 15 de diciembre con misa emotiva y asado jugoso.
Terminamos agradeciendo a Dios esta experiencia de Compañía de Jesús en todos los sentidos. Nos unimos más a Dios y entre nosotros. Hemos hecho un grupo de amigos en el Señor que nos ha costado separar y según van llegando a sus respectivos países van escribiendo para seguir en contacto. Yo me quedo por Chile con nuevas experiencias que ya iré narrando con la impuntualidad de siempre (este blog NO se cierra).
Nuestra evaluación ha sido muy positiva en especial por la buena acogida que hemos tenido de los jesuitas chilenos en todos los sitios donde hemos estado. Esto ha sido como una segunda entrada en la Compañía, para mi después de casi veinte años de jesuita, después de superar crisis, bajones míos e institucionales, heridas y separaciones, ahora vuelvo a retomar la alegría de los diecinueve años con los que entré al noviciado y como en una segunda ingenuidad descubro la novedad de mi vocación. La Tercera Probación ha sido como abrir el baúl de los buenos recuerdos y sacar los momentos de luz, de cercanía con Dios, de amor por el mundo, de ayuda y servicio, de creatividad y comunicación, de arte y de canto, de consolación y de vida dada a mi pobre manera. Con ella, he recuperado y engordado la memoria amable de mi vida. Ahora, seguiré encontrando al Señor de la vida mientras, como decía un jesuita poeta, me quede parte en este tiempo de nostalgia de Dios.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy buenas, Padre. Veo que no para Vd quieto y no para de contarlo
Un abrazo de un amigo de los diecisiete y antes.